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El clorador salino de Parla es indispensable para disfrutar a fondo del verano. Sin embargo, de nada te servirá si no aprendes a cuidar del agua y que esté limpia en todo momento. Para esto no te queda otra que aprender sobre los principales parámetros a vigilar en el agua de la piscina. Uno de los más importantes es el pH. Si quieres conocerlo, te lo contamos en esta entrada de nuestro blog.
El pH es el coeficiente con el que se mide el nivel de acidez del agua y, de hecho, es el parámetro más importante a tener en cuenta. Al mantenerlo en un punto equilibrado, conseguirás que el agua se mantenga cristalina y en mejor estado durante más tiempo. El valor ideal para una piscina es de entre 7,2 y 7,6. En caso de que esté por encima o por debajo, deberás equilibrarlo para que las bacterias y los hongos no encuentren un hábitat cómodo para ellos.
Un buen clorador salino debe incluir el cuidado a fondo del pH. En caso de que esté por debajo de 7,2, el agua irá ganando en acidez progresivamente. Los materiales de la piscina acabarán dañados, como las marcas de corrosión en escaleras y sistema de filtración, y, posiblemente, tú podrías sufrir irritación en la piel, los ojos y las mucosas.
En caso de que el valor del pH escale por encima de 7,6, cada vez será más alcalina y tu piel y mucosas podrían irritarse, además de sufrir también daños en la piscina como agua enturbiada, cloro con pérdida de eficacia o aparición de agrupaciones calcáreas en diferentes lugares.
Como has podido ver, cuidar del pH del agua de tu piscina es básico para poder disfrutar de un buen baño sin daños para los tuyos ni para la propia piscina. En Piscinas Aquaeski somos especialistas y encontrarás un grupo de expertos centrados en tus necesidades. ¡Contáctanos!